Estos dos señores, se pasean por la playa henchidos de normalidad.
Pero eso no existe. Y sinó por qué uno entierra a su propio hijo para fotografiarle
y el otro pasea su triste existencia de las duchas a la playa,
rodeado de gritos de exaltación veraniega?
Se ve que te han sentado muy bien las vacaciones, te han salido fotones por las italias
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